UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE

Concierto del Ciclo "Foco Boulez" realizado en conjunto por el Centro de Experimentacion del Teatro Colon y la "Usina del Arte": Actuacion del Cuarteto "Marmen" de Gran Bretaña, Adrien Boisseau (Viola), Yan Levionnois (Violonchelo). Programa: Arnold Schoenberg: Trio de Cuerdas, Op. 45.; "Noche Transfigurada" (Para Sexteto de Cuerdas). Pierre Boulez: "Messagesquisse", Para Violonchelo solista y sexteto de Violonchelos (Dedicada a Paul Sacher). Usina del Arte (Sala de Camara), Viernes 23 de Junio de 2017.

NUESTRA OPINION: EXCELENTE

  Este Concierto del homenaje a Pierre Boulez que llevo por titulo "Schoemberg ha Muerto", derivo en uno de los programas mas contundentes y espectaculares de musica del siglo veinte que se hayan escuchado en los ultimos tiempos. La presencia del Joven cuarteto "Marmen", fundado en el "Royal College of Music" de Londres y hoy Ensamble Asociado del Conservatorio de Birmingham, mas dos destacados instrumentistas europeos como lo son Adrien Boisseau e Yan Levionnois (Este ultimo venido de emergencia para reemplazar al originalmente anunciado Victor Julien-Lafferriere) mas Violonchelistas Argentinos y extranjeros de real valia para presentar tres obras de densidad poco comun, plenas de dificultades tecnicas,  dio como resultado la presencia de publico muy joven, mayoritariamente estudiantes de musica, avidos por escuchar este repertorio ofrecido por musicos tambien jovenes arriba del escenario de la sala de camara de la Usina del Arte los que verdaderamente derrocharon talento para dejar sacudido hasta al mas impavido. Schoemberg ha sido uno de los referentes en el repertorio y la musica de Pierre Boulez. Ya casi debe considerarse  "de Culto" la version que el extrordinario creador frances ha hecho de "Gurrelieder" al frente de la Sinfonica de la BBC de Londres alla por comienzos de los setenta del pasado siglo,  cuando estaba consolidado ya por ese entonces como el sucesor de Leonard Bernstein al frente de la Filarmonica de Nueva York  (Ademas de cultivar ambos una muy entrañable amistad). No es casual la eleccion de dos obras de Schoemberg de disimil escritura ambas, mas alla de que es archiconocido el tema de que "Noche Transfugurada" es una simbolica despedida de la tonalidad para comenzar la exploracion del Dodecafonismo, y para el medio una obra muy personal del gran creador frances dedicada a Paul Sacher "Messagesquisse". Repertorio de muchisimo compromiso al que los visitantes y los musicos locales le hicieron con creces el honor.

  Tres de los integrantes del "Marmen", fueron los interpretes del Trio Op. 45. Johannes Marmen como primer violin, Tetsumi Nagata en Viola y Steffan Morris en Violonchelo. Obra de altisima densidad y suma contundencia. Tres movimientos que van sucediendose , al menos en esta version, casi sin solucion de continuidad. Escritura casi endiablada a partir de acordes que actuan como disparadores de ideas y en donde los interpretes se revelaron como instumentistas de alta calidad tecnica, muy buen sonido y  poseedores de habil capacidad resolutiva.

 En el centro Boulez y "Messagesquisse". Una idea, una frase musical que desarrolla una complejidad de sonidos y una intensidad poco comunes. Yan Levionnois se mostro como un notable interprete de musica contemporanea. Altisima tecnica, sonido pleno capaz de partir de las notas mas bajas y pasar a las mas altas con una flexibilidad poco comun. Los seis violonchelistas acompañantes, capitaneados por Steffan Morris (Violonchelista del Marmen), estuvieron compenetrados de la misma manera con la obra. Por momentos Levionnois marcaba con el arco el ritmo del acompañamiento y ahi tambien estaba Morris, turnandose en ese rol cuando el solista debia hacer lo suyo. Fue a todas luces un trabajo de equipo memorable.

  Y el cierre con el "Marmen" a pleno, mas Boisseau y Levionnois , fue con una inolvidable version de "Noche Transfigurada" en su original para sexteto de cuerdas. Plena de matices, riqueza de sonido, intensidad, intimidad y esos gloriosos compases finales que van extinguiendose suavemente para dejar sumido al auditorio en un profundo silencio que nadie desea quebrar, hasta que por fin los interpretes bajan los arcos y estalla una ovacion interminable, a todas luces merecida y que dejan en uno la satisfaccion de haber asistido a una sesion inolvidable.

 

Donato Decina