martes, 22 de enero de 2019

UNA VELADA MUY AUSPICIOSA Ciudad de Mar del Plata: Teatro Radio City, Concierto Sinfónico. Actuación de la Orquesta Sinfónica Municipal de General Pueyrredón (Mar del Plata), Director: Diego Lurbe. Solista: Mariano Rey (Clarinete). Programa: Obras de Beethoven, Von Weber y Brahms. Sábado 19 de Enero de 2019. NUESTRA OPINION: MUY BUENO. Si hay algo que ha caracterizado a Mar del Plata en los últimos 75 años es la realización de Conciertos Sinfónicos durante la temporada estival. Si tenemos en cuenta (tal el testimonio que nos han dejado en su libro Daniel Varacalli Costas y Sebastiano de Filippi) que el pionero fue nada menos que Héctor Panizza al frente de músicos de la Orquesta Estable del Teatro Colón en el por entonces recién inaugurado Teatro Auditorium del Casino Central (mientras que en el Hotel Sasso de Punta Mogotes en simultaneo cobraba vida la versión castellana de “Aurora” tal como hoy se la conoce con la Canción a la Bandera que entonábamos en la escuela primaria). Luego desde 1946 la recién formada Orquesta Sinfónica Municipal de Buenos Aires (Hoy nada menos que la Filarmónica Porteña) siguió esos pasos probándose ante el público en “La Felíz”. En 1945 nace el primer conjunto sinfónico Marplatense por iniciativa de músicos que convocaron al maestro Néstor Romano para que los conduzca, los que finalmente en 1949 fueron incorporados como conjunto Estable por la Municipalidad de General Pueyrredón adquiriendo desde entonces la denominación de Orquesta Sinfónica Municipal que este año por lo tanto cumplirá 70 años como Organismo del Estado Comunal. Si le sumamos las presencias de Grupos como los Cuerpos Estables del Teatro Argentino de La Plata, la Orquesta Sinfónica Nacional, los Ciclos realizados por la Sinfónica de Bahía Blanca en la pasada década y desde el año pasado los Cuerpos Estables del Teatro Colón ( dado que desde este año el Teatro Tronador funcionará como sede externa del Coliseo Porteño), con sus mas o con sus menos, la música sinfónica tiene su lugar cada verano en Ntra. Principal ciudad veraniega. Es importante también la cantidad de excelentes solistas que año tras año se presentan junto a la Sinfónica Marplatense. Comenzando por el mayor solista que diera la ciudad: Manuel Rego. Junto a su nombre los de Fernando Favero, Darío Volonté, Vera Cirkovic, Luís Lima, Gustavo López Manzitti, Hernán Iturralde, Rubén Martínez, María Bugallo, María Pía Piscitelli, Patricia Gutiérrez, Alicia Ceccotti o créditos locales como María José Dulín y Antonio Grieco. Batutas titulares además de Romano que participaran junto al conjunto en temporadas estivales: Guillermo Scarabino, Washington Castro (Titular e Invitado), Guillermo Becerra (Titular e Invitado), Carlos Vieu, José María Ulla, Pedro Ignacio Calderón (Titular e Invitado) . Directores Invitados: Mario Perusso, Jorge Fontenla, Simón Blech, Lalo Schiffrin. Es decir, que estamos hablando de gran parte de lo más granado de los últimos tiempos en materia de Dirección Orquestal Argentina. Instrumentistas surgidos o con paso por la Orquesta: Roberto Calomarde, José Garrefa o quienes desde la Sinfónica Marplatense acompañaron a Manuel Rego en el inolvidable Quinteto Municipal de Piano y Cuerdas (mas conocido cómo “Quinteto Rego”), el que luego de la “Camerata Bariloche” y el “Cuarteto Almerares” fuera la formación camarística más trascendente de Ntro. País: Mario Morelli, Aaron Kemmelmajer, José Di Pilato y Hugo Tagliavini (este último hoy también en la Estable del Colón) y por entonces muy joven y hoy un consagrado: Mariano Rey, solista de esta velada. Saquen conclusiones de la importancia de estos ciclos, aún en épocas de “vacas flacas” y vean como surgen datos para el asombro. El 2018 concluyó con la determinación del entonces titular del Organismo, Juan Martín Miceli de presentar su dimisión al cargo. El titular de la Secretaría de Cultura Municipal, Christian Rabe, convocó a Diego Lurbe (antecesor de Miceli en el cargo) para volver a la función y este la ha aceptado. Tras un comienzo con un programa de música popular en fusión sinfónica (Correspondió a temas de Joan Manuel Serrat y la próxima presentación será dedicada a Gustavo Ceratti), llegó por fín el turno del género Sinfónico propiamente dicho y tal como lo conocemos, sorprendiéndonos gratamente por el hecho de que no se trató de una programación “estival”, sino de un Concierto con todas las de la ley. Para el comienzo se ofreció la Obertura de la Opera “Fidelio” de Beethoven, ideal para un comienzo, en una versión a un “Tempi” un poco mas lento de lo habitual. Pudo percibirse un claro “desbalanceo” entre una cuerda muy disminuida en todos sus sectores con respecto a vientos, bronces y percusión, estos con un número más aceptable de miembros, por lo que el sonido de las cuerdas fue muy débil, opacadas ampliamente por el resto del orgánico. No debe achacársele a un tema acústico el problema, ya que se puede decir que la sala del Radio City es muy aceptable en cuanto a sonido natural (Y entiendo que al estar el Teatro Municipal Colón afectado a espectáculos de carácter rentado de compañías privadas, se dispuso el empleo de esta sala). Aun así pudo percibirse una idea clara de Diego Lurbe, quien trató de llegar al fondo de la composición y el espíritu “Beethoveniano” estuvo presente en la sala. Sabemos de la excelencia de Mariano Rey como interprete. Sus presentaciones lo testimonian de modo permanente, como también valoramos la amplitud de su repertorio. Aquí abordó el Concierto Nº 2 para Clarinete y Orquesta, Op. 74 de Carl María Von Weber. Un toque exquisito, técnica formidable y pleno en la interpretación. Se lo vió disfrutar del hecho artístico. Un “allegro” inicial muy bien expuesto. Una “Romanza” central en la que se floreó, no dejando detalle alguno librado al azar, con momentos de hondo lirismo y magnífica expresividad y una “polacca” de cierre en la que remató su labor de modo descollante. La Orquesta muy bien guiada por Lurbe, acompañó con suma corrección. Aquí el hecho de requerir un orgánico instrumental mucho más reducido favoreció a la versión, por lo que el conjunto se fue asentando y su sonido fue mucho más homogéneo. La segunda parte mostró a Lurbe asumiendo el desafío de abordar la Cuarta Sinfonía Op.98 de Johannes Brahms. Obra Capital de la Música Sinfónica, con la que se mostró una progresión cronológica en cuanto a épocas y estilos en la Alemania del Siglo 19 (Beethoven, Weber, Brahms) y un tránsito entre Romanticismo y Post-Romanticismo muy bienvenido. Aquí la versión fue de menor a mayor, ya que volvió a percibirse la carencia de cuerdas, Ello sumado a algunas pifias y desacoples en un sector del bronce, especialmente en el sector de Cornos los que a pesar de ello afrontaron satisfactoriamente el inicio del segundo movimiento. Aquí afloró la personalidad del Director, quien fraseó muy correctamente, dirigió de memoria, estuvo atento a todo detalle y con mucha firmeza mantuvo el espíritu Brahmsiano. Y sobre todo, en los dos últimos movimientos se pudo apreciar lo mejor de la Sinfónica Marplatense ya que aquí sí pareció que los interpretes de cuerda lograron captar la necesidad de cubrir con plena energía la falta de un mayor número de compañeros, por lo que la “passacaglia” de cierre fue expuesta imbuida de vitaidad, ímpetu y plena de la consabida “rebeldía” que Brahms despliega en cada variación . Por lo que el final fue vibrante y desbordante de entusiasmo. Previo al comienzo de la Sinfonía se anunció que la velada marcaba la despedida del Cornista Adrián Toyos, un histórico de la Sinfónica Marplatense, el que tras 28 años ininterrumpidos de desempeño se acogía a la jubilación. Gustavo López de Felice, Secretario del Conjunto le entregó un testimonio, que el maestro visiblemente emocionado agradeció, siendo ovacionado por la concurrencia que ocupó más del 75 % de la sala abonando entradas muy accesibles. Vistas las circunstancias que el País y Mar del Plata en particular atraviesan, suena utópico el cubrir cargos vacantes en la Orquesta. Ojalá para el Maestro Lurbe y los músicos que el entusiasmo no decaiga y que los desafíos musicales que se planteen en el futuro tengan el mismo resultado que en los dos últimos movimientos de Brahms. Y para los responsables del área cultural, primera prioridad ni bien se atraviese la emergencia es cubrir cargos vacantes. Estos ciclos son vidriera de Mar del Pata ante el país y la ciudad no merece resultados mediocres. Donato Decina

lunes, 21 de enero de 2019

RECREADA CON CREATIVIDAD E INTELIGENCIA Ciudad de Mar del Plata: Museo Municipal Juan Carlos Castagnino (Villa Ortíz Basualdo). Compañía “Lírica Libre”: “La Traviata-Opera Intima” (Basada en la Obra de Giuseppe Verdi con libreto de Francesco María Piave, inspirado en “La Dama de las Camelias” de Alexandre Dumas [H]). Interpretes: María José Dulín (Violetta Valery), Iván Maier (Alfredo Germont), Fernando Santiago (Giorgio Germont), Edith Villalba (Annina), Pablo González Aguilar (Giuseppe Verdi-Dr. Grenvil). Piano: Horacio Soria, Violin: Jon Crespo Herrero. Vestuario cedido por Mariela Daga, Caracterización. Equipo de “El Camarín”, Objetística y Video: Adriana Padra, Dirección Musical: Horacio Soria, Dirección Escénica: Pablo González Aguilar. Función del 18 de Enero de 2019. NUESTRA OPINION: EXCELENTE. Si hay algo que debe reconocérsele a Pablo González Aguilar es su creatividad para concretar ideas en base a obras operísticas ampliamente conocidas y en un medio como Mar del Plata en donde la lírica solo llega hasta el “estado embrionario” y no se registran apoyos que sostengan los esfuerzos, por lo que muchas veces los intentos por conformar compañías líricas naufragan a poco de iniciarse. Es así que hace unos años atrás sorprendió con la presentación del primer acto de “La Walkyria” de Wagner, recreando la exhibición que el compositor hiciera en su exilio de Lago Triebschen (Suiza) ante un grupo de selectos amigos. Ello fue en los salones del Mar del Plata Golf Club con un elenco que integraron Juan Borja (Siegmund), Irene Burt (Siegliende) y Claudio Rotella (Hunding) en medio de una cena servida en el lugar. Ahora, una idea de la Soprano María José Dulín obró como disparador para presentar las escenas mas intimas de “La Traviata”, la inmortal Obra de Giuseppe Verdi con Libreto de Francesco María Piave, en el imponente marco de la Villa Ortíz Basualdo, sede del Museo Municipal Juan Carlos Castagnino, utilizando alguno de los interiores de ese magnífico lugar y, por supuesto, su fastuoso mobiliario como ambientación de esas escenas, los cuales fueron revisados y sujetos a una intervención visual por Adriana Padra. Y es así como el Director de Escena se coloca la máscara del genio de Buseto y como tal recibe a los espectadores ( Los que por razones de espacio no pueden exceder los 40) , para ponernos en situación con las circunstancias históricas en las que se concretó la composición del trabajo y en la narración del argumento de la Opera . Se nos ofrecerá una degustación de repostería, traída por Aninna la que estará acompañada convenientemente por una copa de Vino Espumante, tras lo cual se ascenderá al comedor en el que se presenciará la escena del brindis entonado por Violeta y Alfredo alrededor de la concurrencia, continuar con la Intimidad de la protagonista y el “E Strano” por supuesto con el “Sempre Líbera” cerrando este instante. Pasamos a un hall de distribución en el cuál presenciaremos ya sentados todo el primer cuadro del segundo acto, tras lo cual un conveniente intervalo nos habrá de depositar nuevamente en el hall de ingreso en donde se nos convidará un “Sundae” heládo de muy buena factura, para retornar al nivel superior al mismo espacio en el que tuvo lugar todo el primer cuadro del segundo acto, pero ahora con las sillas dispuestas en forma absolutamente invertida a la escena anterior y apreciar todo el tercer acto íntegro y el trágico desenlace de la obra. Todo el trabajo de escena y el soporte lumínico tuvo una formidable realización, el tener tan cerca a los intérpretes, participar dentro del “Sempre líbera” o seguir de cerca el desgarrador “Addio del Passato”, constituyen de por si un fuerte golpe de efecto al que el final le otorga un ataque fuertemente demoledor, tal el Shock en el que quedan tanto intérpretes como espectadores. El vestuario aportado por la muy reconocida Mariela Daga, hecho con muy buen gusto y elegido acorde al espacio escénico en el que se desarrolla la representación realza aún más la versión y las caracterizaciones y maquillajes que aportó la gente de “El Camarín” no pudieron ser más ajustadas a todo el conjunto visual, por lo cual esa faz tuvo un resultadoinmejorable. En lo actoral, el Director logró extraer de cada interprete toda la creciente carga dramática que todos sabemos contiene “La Traviata” con lo cual redondeó una labor sencillamente perfecta. En lo musical, Horacio Soria en Piano y Jon Crespo Herrero en Violín acompañaron de manera acertada y precisa a los interpretes vocales, por supuesto descollando en el cierre de la Opera con la muerte de Violeta, pero además se incluyeron la irradiación de fragmentos grabados de las escenas de conjunto para acompañar a “Verdi” en la narración del argumento. Soria además tuvo a su cargo la Dirección Musical del espectáculo, logrando un superlativo rendimiento de todas las voces. En lo vocal, María José Dulín sobresalió en lo protagónico. Profundamente consustanciada con el rol, tuvo firmeza, garra vocal y escénica y logró conmover en el final al público con total entrega. Iván Maier, quien debutaba el rol de Alfredo, tuvo el “Physique du Rol”. Joven, con muy buen canto, con presencia, fue el joven deslumbrado por Violeta, impulsivo, capaz de hacer todo por amor. Fernando Santiago fue “el Giorgio Germont”. Voz profunda, segura, con una actuación impecable, de total presencia en los dúos con Violeta y Alfredo y un “Di Provenza al Mar” descollante. Por segunda vez en la semana disfrutamos de la voz de Edith Villalba ahora encarnando a una Aninna fiel a Violeta hasta el último aliento de Esta y el propio Pablo González Aguilar asumió por un instante la Piel del Dr. Grenvil, dando en el tipo justo de quien se apiada de la infortunada protagonista acompañándola hasta su último suspiro. Restan tres fines de semana en Viernes Y Sábados en los que habrán funciones siempre a partir de las 22 hs. Se está en tratativas para poder agregar más fines de semana en Febrero. Por las redes sociales se pueden efectuar reservas. Mi consejo es que si está allá, concurra y no deje para último momento la adquisición de las localidades. Vale mucho la pena y este esfuerzo “a pulmón” merece entradas totalmente vendidas en cada función. Donato Decina
UNA GALA JERARQUIZADA POR MUY BUENAS VOCES Ciudad de Mar del Plata: Actuación de la Banda Sinfónica Municipal, Director: José María Ulla. Solistas: Edith Villalba (Soprano), Antonio Grieco (Tenor). Programa: Gala Lírica con fragmentos de Opera y Canzonettas populares. Teatro Roxy, 15 de Enero de 2019. NUESTRA OPINION: MUY BUENO Y en apenas quince días después del inicio del 2019, comenzamos la actividad de crítica musical cubriendo esta simpática e interesante gala lírica que sirvió de marco a la celebración del centenario de la municipalización de este organismo decano de las agrupaciones musicales estables de la “Ciudad Felíz”. Es ahora el Maestro José María Ulla quien ejerce la titularidad de Esta agrupación y dos valores muy reconocidos del medio Marplatense, la Soprano Edith Villalba (recordada en el medio Porteño por ser quien estrenó en el rol de “Medora” de “Il Corsario” de Giuseppe Verdi en el Teatro Municipal Roma de Avellaneda) y el Tenor Antonio Grieco (de vastísima trayectoria tanto en La Plata como en Avellaneda y Buenos Aires), muy estimado en la “Perla del Atlántico” por sus actuaciones tanto en opera como en recitales de amplia convocatoria de público. Debo destacar que si bien el repertorio ofrecido estuvo integrado por fragmentos y canciones “Que conocemos todos”, tiene mucho valor la categoría de los arreglos ofrecidos, especialmente realizados para esta Banda Sinfónica tanto por sus integrantes como por reconocidos interpretes del medio local como Perla Delucchi o Guillermo Becerra (Anterior titular de Este Organísmo). Digamos entonces que la Gala se inició con una muy efectiva versión de la Obertura de “El Barbero de Sevilla” de Rossini y mas sorprendente aún en el centro del programa, una muy exquisita transcripción del “Intermezzo” de “Cavallería Rusticana “ de Mascagni, la que dejó una inmejorable impresión, acompañando luego a las voces de acuerdo con las precisas marcaciones del Maestro Ulla. En lo Vocal, Edith Villalba se lució en una muy delicada versión de “O Mio Babbino Caro” de “Gianni Schicchi” de Giacomo Puccini, una sentida interpretación de “Vissi D’Arte” de “Tosca” del mismo compositor y pasar a una formidable intervención en “Torna a Sorrento”, rara vez escuchada por una interprete femenina y lo hizo con una encomiable entrega. En tanto Grieco lució a pleno en “E Lucevan La Stelle” de “Tosca”, un “Vesti la Giubba” de “I Pagliacci” de Ruggiero Leoncavallo cantado con toda la garra y rematar la parte lírica con una excelente intervención en “Nessun Dorma” de “Turandot” del gran creador de Lucca y en Canzonettas un excelente “Core N’grato” vertido con toda la pasión. Por supuesto hubo lugar para dúos, el clásico Brindis de “La Traviata” y para el cierre una muy lograda versión de “O Sole Mío” en donde Grieco cedió caballerescamente a su compañera de labor los adornos vocales principales que Villalba abordó harto satisfactoriamente. El público, que respondió cubriendo en casi un 75 % la sala con entradas pagas, respondió con cerrados aplausos las intervenciones y se quedó con ganas de mas, por lo que se debieron reiterar ambos dúos para ahora sí concluir la grata velada. Donato Decina