Espléndida reapertura de actividades presenciales en
el Centro Cultural Kirchner
RITORNO CON SPIRITO
Martha CORA ELISEHT
Tras el receso provocado por la
nueva epidemia –mal denominada “segunda ola”- de COVID 19, el Centro Cultural Kirchner (CCK) reabrió sus
puertas a las actividades presenciales con una serie de conciertos de cámara, que
comenzaron el pasado sábado 3 del corriente en la Sala Sinfónica –Auditorio
Nacional- con la participación del dúo formado por Oleg Pishenin (violín) e
Iván Rutkauskas (piano), quienes interpretaron el siguiente repertorio:
-
Ludwig
van BEETHOVEN (1770-1827): Sonata para
violín y piano en Fa mayor n°5, Op.24 (“Primavera”)
-
Richard
STRAUSS (1864-1949): Sonata para violín y
piano, Op.18
A las tradicionales medidas de protocolo
sanitario (aforo del 30%, distanciamiento social, uso de alcohol en gel y de
barbijo en el interior de la sala de conciertos) se agregó una nueva modalidad:
quienes no hayan adquirido sus localidades de manera virtual con anticipación
no podrán ingresar al Centro. Ya no hace falta la aplicación CUIDAR para poder
asistir, pero lo primero que se debe mostrar al personal es la entrada. Este
último se destaca por su amabilidad y su gran predisposición para brindar una
excelente atención al público. Los habituales programas de mano han sido
reemplazados por pantallas instaladas en el foyer
y en la entrada de la sala.
Las obras fueron ejecutadas con
precisión, dulzura, ímpetu, garra, maestría
y por sobre todas las cosas, pasión. Este cúmulo de ingredientes fue
indispensable e imprescindible para brindar una interpretación magnífica y lograr
una perfecta correspondencia y simbiosis entre ambos músicos. La precisión y la
maestría de Oleg Pishenin se notaron desde los primeros compases de la
mencionada sonata de Beethoven en sus cuatro movimientos (Allegro/ Adagio molto espresivo/ Scherzo: Allegro molto- trío/ Rondó:
Allegro ma non troppo), haciendo gala de su magistral fraseo y lirismo,
además de una técnica impecable. E Iván
Rutkauskas fue un perfecto acompañante, que se lució en los pasajes para su
instrumento en el Adagio molto espresivo y
fundamentalmente, en el Scherzo y el Rondó. El resultado fue un estupendo
equilibrio sonoro y un final brillante, que recibió numerosos aplausos y
vítores por parte del público.
Si bien el repertorio de cámara de
Richard Strauss es menos conocido que su producción sinfónica y operística, la Sonata para violín y piano Op.18 es una
obra de singular belleza, caracterizada por su cromatismo y expresividad.
Compuesta durante su juventud, consta de tres movimientos: Allegro ma non troppo/ Improvisación: andante cantábile/ Finale:
Andante- Allegro. Una vez más, el dúo Pishenin- Rutkauskas encaró las
dificultades técnicas que posee esta obra con precisión y maestría, pero
también, con la cuota de pasión necesaria para imprimirle el característico
sello romántico del compositor. Los pasajes para piano (arabescos, crescendi, diminuendi, cantábile) fueron perfectamente
resueltos por Iván Rutkauskas, mientras que Oleg Pishenin se destacó en un
espectacular final donde el violín tiene un pasaje en cascada sumamente difícil, caracterizado por rubatos y ostinatos. Al finalizar, los numerosos aplausos y vítores por parte
del público obligaron al dúo a hacer un bis:
una transcripción para violín y piano de un número de la Suite de Romeo y Julieta de Sergei Prokofiev, donde los músicos volvieron a
lucirse en su interpretación.
Todos los conciertos tendrán lugar
los sábados a las 19 horas y las entradas pueden adquirirse a partir del
miércoles anterior a cada concierto hasta agotar reserva mediante la página
web: www.cck.gob.ar. Actuarán intérpretes de la jerarquía de Sebastián
Masci, Amalia Pérez, Virginia Correa Dupuy, Lucrecia Jancsa, Tamara Benítez,
Marina Calzado Linage, Luis Caparra, Freddy Varela Montero, Elián Ortiz,
Mariano Rey, Gloria Pankaieva, Gabriel La Rocca y Fernando Chiappero, entre
otros. Un programa muy variado, con intérpretes de primer nivel y entrada libre
y gratuita es la propuesta que ofrece el CCK en esta vuelta a la
presencialidad. Ojalá que la situación sanitaria mejore para poder volver a
apreciar a los artistas en su ámbito natural, tras un silencio muy prolongado.
Y parafraseando a los movimientos de las obras musicales, que sea el ritorno con spirito que lleva por título
esta nota y que fue la principal característica de este concierto inaugural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario