Un
comienzo deslucido
“Fausto" inicia la temporada del Colón
Teatro
Colón.
Jueves 16
de Marzo de 2023
Escribe:
Graciela Morgenstern
“Fausto”, de Charles Gounod
Libreto: Jules
Barbier y Michel Carré
Elenco: Liparit Avetisyan,
Alexei Tikhomirov, Anita Hartig, Vinicius Atique, Juan Font, Florencia Machado
y Adriana Mastrangelo
Coro Estable del Teatro Colón Orquesta
Estable del Teatro Colón
Director del Coro: Miguel Fabián Martínez
Règie, escenografía,vestuario, iluminación y coreografía: Stefano
Poda
Director
de Orquesta: Jan Latham-Koenig.
Con
una deslucida versión de "Fausto", de Charles Gounod, dio inicio la
temporada 2023 del Teatro Colón, en el marco del programa “Divina Italia”, que consistió en
que el regisseur Stefano Poda estuviera a cargo de la producción escénica.
Pero primero lo más importante.
En el aspecto musical, la versión contó con un elenco desparejo. La puesta en escena, con un escenario abierto
hasta el fondo, perjudicó a la mayoría de los cantantes. El tenor armenio
Liparit Avetisyan fue un protagonista de timbre agradable y agudos seguros. Sin
embargo, no logró transmitir el dilema del personaje. Sus arias no conmovieron
y, aunque mostró más eficacia en los dúos con Margarita, no logró convencer.
En tanto, el Mefistófeles de Alexei Tikhomirov, no tuvo la imponencia
que se espera del personaje. Sus recursos vocales no son malos pero sólo
alcanzó un nivel de corrección.
En cambio, la soprano Anita
Hartig fue uno de los pilares de la función. Con bello, color vocal, fraseo
delicado y entrega al personaje, realizó una muy buena composición de
Margarita.
El barítono brasilero Vinicius
Atique no logró el nivel esperado para Valentin, siendo apenas correcto, con
una actuación muy deslucida.
Florencia
Machado fue un Siébel correcto y Adriana Mastrángelo y Juan Font realizaron una buena labor como
Marta y Wagner, respectivamente.
La puesta
en escena y la ubicación del Coro Estable en el escenario hicieron que el
sonido fuera desequilibrado. Pero aún en estas condiciones, el mencionado coro
cumplió una labor de excelencia impecable, bajo las órdenes de su director Miguel Martínez. El Coro fue el otro pilar de
la función.
Jan
Latham-Koenig realizó una lectura despareja de la partitura, sin aportar mucho
más que eso: una lectura, aunque la Orquesta Estable respondió a sus órdenes
con eficacia.
Ya en el
aspecto visual, que Stefano Poda realizó en su totalidad, la escenografía
simbólica y despojada, consistía en un anillo que adoptaba diferentes
posiciones según la escena. Y alrededor, adentro o encima del anillo se iban
sucediendo las diferentes situaciones.
Dicen que
el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Es el
caso de Poda. Una vez más abrió el escenario en toda su extensión, perjudicando
la labor de los cantantes, al igual que en "Nabucco". O será que no
sabe nada de canto? Habría que explicarle.
las
escenas estuvieron plagadas de cursilerías, como globos negros, paraguas, una
"ducha" de agua se supone que bendita sobre Siebel, para nombrar sólo
algunas. La marcación escénica de los solistas fue muy endeble e inconsistente
en muchos momentos. El vestuario fue de dudoso gusto en algunos momentos,
mientras que la iluminación fue buena en general. No hubo nada destacable en
las coreografías.
En fin,
ya vendrán tiempos mejores.
CLASIFICACION: REGULAR
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