Extraordinaria actuación de Teo Gertler con la Sinfónica Juvenil en el Sarmiento
UN PEQUEÑO GRAN VIRTUOSO
Martha CORA ELISEHT
Durante el transcurso de esta semana se llevó a cabo un encuentro de cultura
eslovaca en la Argentina dentro del marco de un convenio de cooperación entre ambos
países. No es casual que se haya elegido el 17 de Noviembre como fecha para
programar un concierto, ya que ese día se celebra la denominada Revolución de
Terciopelo en dicho país -un movimiento pacífico liderado por estudiantes y por el
dramaturgo Václav Havel en 1989- que terminó con la hegemonía del Partido
Comunista de Checoslovaquia tras 45 años de permanencia en el poder. Pese a la
represión policial en primera instancia, las manifestaciones se multiplicaron y se
desarrollaron en forma pacífica en Praga y Bratislava hasta que, finalmente, se produjo
la entrega del poder a fines de 1989, donde Havel asume la presidencia de la república.
Posteriormente, se disuelve la antigua Checoslovaquia en 1993 con la creación de
ambas repúblicas.
A 35 años de la mencionada revolución, se organizó un concierto en el Auditorio
Nacional del Palacio Domingo F. Sarmiento auspiciado por la Embajada de Eslovaquia
en la Argentina el pasado domingo 17 del corriente, con participación de la Orquesta
Sinfónica Nacional Juvenil “Libertador Gral. San Martín” dirigida por Mario Benzecry
y el violinista eslovaco Teo Gertler como solista para ofrecer el siguiente programa:
- Concierto en Re mayor para violín y orquesta, Op.77- Johannes BRAHMS
(1833-1897)
- Danzas sinfónicas, Op.64- Edvard GRIEG (1843-1907)
Previamente al inicio del concierto, el maestro Benzecry se presentó en el escenario
del Auditorio Nacional e invitó al Sr. Embajador de Eslovaquia en Argentina – Ratislav
Hindický-, quien agradeció al público su presencia y explico los acontecimientos
históricos transcurridos en su país natal hace 35 años atrás. Fue quien posibilitó la
presencia del solista, quien es un auténtico niño prodigio. A los 8 años obtuvo el
segundo premio en el 17° Concurso Internacional de Jóvenes Músicos Cascanueces en
Moscú y actuó con la Orquesta Académica de dicha ciudad. Posteriormente, ganó el 1°
premio del Concurso Internacional para Jóvenes Violinistas Lipinski- Wieniawski en
Polonia y el primer premio en el Concurso Internacional de Violín G. Ph. Telemann en
Poznan (Polonia). A partir de allí y con sólo 16 años ha desarrollado una carrera
meteórica que lo impulsó a actuar en los principales escenarios del mundo y
actualmente se perfecciona en el Instituto Liszt de Budapest.
Tras las palabras de agradecimiento y una breve reseña sobre las obras, Mario
Benzecry y Teo Gertler tomaron sus puestos sobre el escenario para ofrecer una
excepcional versión del mencionado concierto de Brahms, donde el solista demostró ser
un auténtico virtuoso del instrumento. Es un concierto que posee pasajes de gran
dificultad técnica en los tres movimientos que lo integran (Allegro non troppo/ Adagio/
Allegro giocoso, ma non troppo vivace). No sólo lo tocó de memoria, sino que su fraseo,
cascada, ejecución de trinos y cadencias fueron de calidad superlativa, logrando un
sonido prístino. El Auditorio Nacional no sólo estalló en aplausos y vítores, sino que,
además, se puso unánimemente de pie tras tan excelsa interpretación. Tal así fue, que
ofreció un bis junto a la orquesta: una transcripción para violín de Oblivion, de Astor
Piazzolla. Se retiró sumamente aplaudido tras la ejecución.
Para la segunda parte del concierto, la Sinfónica Nacional Juvenil brindó una
versión magistral de las Danzas Sinfónicas, Op.64 de Grieg, compuestas entre 1896 y
1897 sobre la recopilación de melodías y danzas folklóricas Ældre og nyere norske
Fjeldemelodier (Viejas y nuevas melodías folklóricas noruegas) realizada por el
compositor y organista Ludvig Mathias Lindeman (1812-1887) y cuyo orden es el
siguiente: Allegro moderato e marcato (Sol mayor, donde se aprecian influencias celtas
en ceilidgh); Allegretto grazioso (La mayor, en ritmo de springar); Allegro giocoso (Re
mayor, en ritmo de halling) y Andante/ Allegro risoluto en La menor. Si bien el sonido
fue muy compacto y brillante en general, se destacaron las solistas de oboe y teclado
(emulando al arpa) en la segunda, al igual que los trombones y la tuba en la última,
logrando una auténtica versión de fuste.
Debido a los recortes presupuestarios en materia de reforma del Estado propulsada
por el actual gobierno, uno de los integrantes de la Orquesta manifestó que no se están
abonando las becas correspondientes a muchos de los músicos desde hace varios meses
y decidieron hacer público su reclamo ante la falta de respuestas. Es una pena que los
fantasmas del pasado retornen una vez más o se pierda la continuidad de un organismo
que representa el sueño de todo músico joven y el semillero del cual se nutren las
principales orquestas sinfónicas de todo el país.