sábado, 7 de agosto de 2021

 

 

LOS MEJORES SONIDOS

 

Teatro Colón de Buenos Aires, temporada 2021: Concierto a cargo de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires, Director: Enrique Arturo Diemecke , Solista: Fernanda Morello (Piano). Programa: Obras de Faure, Ravel y Bizet. 06 de Agosto de 2021.

 

NUESTRA OPINION: MUY BUENO.

 

 En lo que significó la apertura de un pequeño abono a 4 conciertos durante todos los viernes de Agosto, la Filarmónica se presentó en la sala del Colón con un programa de música francesa armado con mucha inteligencia no solo por ser funcional a la formación que hoy por hoy la Orquesta puede presentar de acuerdo al protocolo sanitario vigente, sino que también el tipo de obras seleccionadas se prestan para acompañar este momento que el mundo todo debe transitar. Por ello no resultó extraño en modo alguno la inclusión de dos Pavanas que llaman a la reflexión, la Op. 50 de Gabriel Faure y la compuesta “Para una Infanta Difunta” por Maurice Ravel. Ambas con su carga melancólica y su enfoque reflexivo, demuestran ser adecuadas para la programación que puede ofrecerse y Enrique Arturo Diemecke, las expuso de manera admirable, logrando de los músicos a su mando empaste, sonoridad por momentos exquisita (sobre todo en Ravel) y respuestas de sectores fundamentales de la Orquesta como vientos y violines por momentos sobresalientes. El programa también incluyó dos obras más extensas que requieren de una muy buena agrupación para llevarla a cabo (la Filarmónica lo fue) y en una de ellas tuvo en Fernanda Morello a la solista ideal. Trátese por su reconocida musicalidad, su impecable técnica o por su total compenetración que la lleva lograr instantes de una abstracción y calidez absolutas, la Balada para Piano y Orquesta Op. 19,  también de Gabriel Faure, fue objeto de una versión estupenda completada por el impecable acompañamiento que Diemecke y los músicos brindaron a la solista. El resultado fue una página muy bien expuesta en donde hubo, color, hondura interpretativa y un dialogo permanente solista-conjunto. Aun cuando se trató de una obra para nada común para el público, los sostenidos aplausos que premiaron la labor motivaron a Morello  a ofrecer un exquisito bis: la “Gnossienne Nº 1” de Erik Satie, verdadera especialidad de la interprete y adecuada página  para la programación del Concierto en donde Morello ratificó las cualidades  a las que nos referimos tanto en el presente comentario como en el que brinde a “El Bello Excéntrico”, homenaje a este extraordinario compositor que Ella ofreciera junto a Virginia Correa Dupuy y a Víctor Torres con dirección de Eva Halac, tanto en la misma sala del Colón como en la Cúpula del Centro Cultural Kirchner. .

  El cierre vino de la mano de una muy correcta versión de la Sinfonía en Do de Georges Bizet, la mejor página orquestal del gran compositor francés. Si bien Diemecke adoptó un “tempi” apenas más lento de lo habitual, no faltaron en ningún momento las buenas respuestas de todos los sectores del conjunto, con preeminencia de Flauta y Oboe  en el segundo movimiento, los que llegaron completamente al fondo de la partitura. Muy pequeñas imprecisiones en el Tercero en nada desmerecen al resultado final que se vio coronado con un chispeante movimiento de cierre  y por ello no extraño la entusiasta y sostenida salva de aplausos con la que el público premió este concierto. El saldo de esta noche nos deja la que entiendo es la más sólida respuesta de una Orquesta luego de los dos forzados períodos de silencio. Y no es poca cosa.

 

Donato Decina

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