ORQUESTA SINFONICA NACIONAL EN EL CCK

 El  miércoles 27/3  se presento la Orquesta Sinfónica Nacional en el Auditorio  Nacional del CCK con la M°Yeny Delgado en el.podio y el contrabajista Julián Medina .como solista

El concierto se inició con la ejecución del Concierto N°15 en Re mayor para contrabajo y orquesta de J.Sperger. Aquí Julián Medina pudo demostrar nuevamente que es uno de los mejores en su cuerda en el país, sobre todo en las ejecucion de la cadencia del 3er movimiento.
Este compositor austriaco, nada difundido en nuestro medio (según el trabajo sobre primeras audiciones de música sinfónica dejado por Julio Palacio, hasta junio/2008 no se estrenaron obras del mismo en Argentina), vivió entre 1750 y 1812, siendo reconocido en su época tanto por sus obras como por su virtuosismo en la ejecución del instrumento. Un acierto la elección de este repertorio. Este concierto probablemente tuvo su primera audición, también a cargo de Julián Medina, esa vez en General Roca ( Neuquén) con la orquesta dirigida por  Fabrizio Danei
En la segunda parte la M° Delgado condujo acertadamente  la orquesta en la Sinfonía Manfredo, op. 58 de P.I. Tchaikovsky, compositor que abordó el sinfonismo bajo diversos géneros, suites orquestales de relativo grado de abstracción, seis sinfonías concluidas y un grupo de composiciones que caen bajo el nombre de poemas sinfónicos, Romeo y Julieta, Francesca da Rimini y Hamlet
Manfredo es otra interpretación sinfonica de una obra literaria, el " drama para ser leído" y no  actuado, según su autor, Lord Byron. Manfredo ocupa sin duda un lugar especial dentro de la obra de Tchaikovsky al constituir la única- volcada al estilo del francés Berlioz. Si su inspiración melódica es inferior a la que podría esperarse de Tchaikovsky, esta partitura es notable por su orquestación,escritura y sentido de evocación. Así se pudo escuchar a la orquesta discurrir en cada uno de los cuatro movimientos transluciendo la historia de este ícono romántico absoluto imaginado por Byron
En el movimiento conclusivo, con la guía de la M° Delgado, la orquesta supo concretar a través de sus sonoridades, la tumultuosa descripción de las escenas en el palacio de Ariman, y casi sobre el final el órgano resultó determinante manifestando  la presencia del Abad y la desaparición de Manfredo diciéndole al sacerdote "Anciano, morir no es tan difícil ", momento en que la orquesta  se "diluyó" en un final emocionante.
Un concierto rutilante, con una Sinfónica Nacional que brilló, como  lo está haciendo últimamente a la que el público despidió con una ovación.
La primera audición en Argentina fue a cargo de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires con el M° Pedro I. Calderón en la conducción el 22 de mayo de 1967 en el Teatro Colón 

                                                                                                  Marta Lugo de Palacio